Si hay una experiencia que disfrutarás en tu viaje a Cuba es recorrer y fotografiar las pintorescas calles de sus ciudades coloniales más emblemáticas.
La mayoría de las calles cubanas tiene ese encanto propio que les aportan la arquitectura y la luz; simbiosis perfecta que te hará sentirte en un sitio romántico, especial y atemporal por completo.
Esta vez queremos contarte sobre las calles más especiales de La Habana, esas que no puedes dejar de conocer y que seguro te inspirarán fotografías geniales. Además del arte y arquitectura que se puede disfrutar en la capital cubana, perderse por sus calles más atractivas e interesantes es también una experiencia súper especial.
En este artículo encontrarás:
Calle Obispo
Esta emblemática calle es una de las más antiguas de La Habana. Fue diseñada en el año 1519, cuando se asentó la Villa de San Cristóbal en las cercanías de la bahía homónima.
Se trata de una calle estrecha, solo para uso peatonal. Es muy animada y está repleta de galerías de arte, tiendas y bares musicales. El lugar perfecto para pasear y, a la vez, para ver a los habaneros en su ir y venir cotidiano, mientras te entretienes y aprendes sobre historia.
La Calle Obispo parte desde cerca de la Plaza de Armas, en la Avenida del Puerto, y se extiende -de este a oeste- hasta el famoso Restaurante-Bar El Floridita, vecino del hotel Manzana Kempinsky.
En esta calle se encuentra también el Hotel Ambos Mundos, lugar donde residió por una larga temporada el Premio Nobel de Literatura Ernest Hemingway, quien conocía Obispo como la palma de su mano.
En un recorrido por el casco histórico de La Habana, no te puedes perder este boulevard que, durante doce cuadras se zambulle en La Habana Vieja de siempre, real y maravillosa, y atraviesa perpendicularmente otras arterias con mucho movimiento y color.
Malecón (Avenida del Golfo)
El Malecón de La Habana, un sitio con fama universal, además de impresionante y atractivo es una obra colosal, un muro costero de concreto que bordea parte de la capital cubana, desde el Vedado a La Habana Vieja.
El Malecón, cuya construcción comenzó en 1901 y se dilató por unas tres décadas, corre a lo largo del litoral norte de la capital cubana. Se extiende desde el Castillo de La Punta, en la entrada de la bahía, hasta la desembocadura del río Almendares, uno de los más bellos de La Habana.
Es el sitio de ocio más frecuentado por los habitantes de la isla y turistas extranjeros que se acercan para respirar la brisa marina, para aprender sobre el lenguaje popular cubano o para trotar a lo largo de sus casi 8 kilómetros de extensión.
Bautizado como “el sofá más largo de la ciudad”, el Malecón habanero es un lugar precioso para los enamorados, en el que se reúnen pescadores aficionados, pintores, fotógrafos o músicos: un verdadero pulso de la ciudad, fiel reflejo de la vida de sus habitantes.
Es el rincón ideal para contemplar los atardeceres más bellos y románticos de La Habana, escuchando el vaivén de las olas del mar. Además, se viste de gala durante los Carnavales habaneros, cuando las comparsas y carrozas, al ritmo de los tambores, toman esta calle como escenario principal.
Paseo del Prado (Paseo de Martí)
El Paseo de Martí fue inicialmente la calle Prado o Paseo del Prado, como se le conoce comúnmente. Esta avenida habanera tiene más de 200 años de historia, y fue por mucho tiempo la más importante y bella de la ciudad.
Actualmente, es un lugar atractivo para los visitantes y sitio de preferencia para los cubanos. En una de sus aceras destaca el Gran Teatro Alicia Alonso, el Telégrafo Axel Hotel y el Hotel Parque Central.
Custodiando esta avenida hay ocho estatuas de bronce con figuras de leones. Está dividida en cuatro secciones fundamentales: el Paseo, el Parque Central, la Explanada del Capitolio y el Parque de la Fraternidad.
Siéntate en uno de sus bancos de piedra con respaldo y base de mármol para que disfrutes del panorama tan ecléctico de su alrededor: farolas de hierro, árboles, mansiones coloniales, el Hotel Sevilla y el Iberostar Grand Packard.
Usualmente, suele haber niños jugando en el paseo y hay un mercadillo de arte y artesanía los fines de semana.
Con una longitud de aproximadamente 2km, es por excelencia el lugar de encuentro y esparcimiento elegido por los habitantes de la isla en todas las épocas.
La Rampa
La Rampa –zona de magnífica urbanización y arquitectura– se encuentra justo en el corazón de El Vedado. Esta arteria conecta otros sitios de interés turístico de La Habana moderna como la bicentenaria Universidad de La Habana, la Plaza de la Revolución y el Memorial José Martí, o la Necrópolis de Colón.
En esta zona de la capital donde confluyen el paisaje marino y la ciudad construida de la Modernidad, en solo cinco manzanas se localizan el Hotel Habana Libre, el Hotel Nacional, cuartel general de la mafia en Cuba desde 1930, el Hotel Vedado, Hotel Saint John’s y el famoso Hotel Capri.
En La Rampa se encuentra también el cine más grande de la Isla: el Yara, el Pabellón Cuba, en el que se realizan importantes conciertos y ferias de artesanía, la heladería Coppelia y la sede del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).
Además, si quieres vivir la noche habanera a tope, en esta calle encontrarás centros nocturnos de fama internacional como el Club de Jazz La Zorra y el Cuervo; el Cabaret Pico Blanco del Hotel Saint John’s; el Salón Rojo del Capri, el Cabaret Parisien del Hotel Nacional y el Restaurante Monseigneur.
Una fecha que desorbita La Rampa es diciembre, cuando La Habana es invadida por el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano. En esos días, además de largas filas a las puertas de los cines Yara y Rampa, podrás encontrarte con actores, realizadores y gente del mundillo del cine, sin glamour ni alfombras rojas, mezcladas con la multitud.
Calle G (Avenida de los presidentes)
Esta avenida, además de su carácter de calle-parque, se distingue por el gran número de esculturas situadas en el paseo central, por lo que constituye hoy uno de los conjuntos escultóricos más importantes de la ciudad.
Desde sus inicios, la gran avenida se nombró “Calle G”, pero la ubicación en 1921 del monumento a Tomás Estrada Palma, primer presidente de la República (1902-1906), y las estatuas de ilustres presidentes latinoamericanos, entre los que se encuentran Salvador Allende, Simón Bolívar o Benito Juárez, condicionó que comenzara a llamarse “Avenida de los Presidentes”.
En sus cercanías hay importantes centros culturales, recreativos y turísticos como el Hotel Presidente, la Casa de Las Américas, el Museo de la Danza, el histórico Hospital Calixto García, el Castillo del Príncipe y la Quinta de los Molinos.
En un recorrido panorámico en un coche descapotable por el Vedado, esta es una de las calles más atractivas para ver y fotografiar.
Con hermosas áreas verdes que la decoran, majestuosos monumentos conmemorativos, modernos edificios racionalistas y las lujosas mansiones señoriales que atesora, casi todas casas particulares de alquiler, con gran encanto.
Consejos para viajar a Cuba
Te animamos a visitar Cuba, no solo para conocer sus calles más interesantes y atractivas, sino también para relajarte y tomar el sol en sus playas más hermosas y rincones naturales menos explorados, para que te sumerjas en su historia y su arquitectura únicas.
Te invitamos a descubrir además sus tradiciones, sus villas coloniales más antiguas, los mejores alojamientos, sus sitios únicos de naturaleza, su gastronomía criolla y, sobre todo, la amabilidad de sus gentes.
Aquí te dejamos algunas tips que pueden serte útiles en tu viaje a Cuba:
- Ciudades coloniales emblemáticas
- Libros clásicos cubanos
- Cursos y talleres en Cuba
- Turismo solidario. Proyectos comunitarios en Cuba
- Sitios para disfrutar de la naturaleza cubana
- Aventura de 10 días en Cuba
- Mejor época para viajar a Cuba
- Vacaciones en familia en Cuba
¡Hasta pronto!
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